Hacer dormir a un bebé es una de las tareas más difíciles de ser padres. No basta con colocarlos en su cuna, arroparlos, darles un beso de buenas noches y hasta el día siguiente.
Los padres desesperados intentan prácticamente cualquier cosa para que sus bebés puedan conciliar el sueño lo más rápido posible, desde guardar completo silencio, hasta leer, cantar, suplicar o sobornar para que se duerman de una vez.
Una rutina constante a la hora de acostarse que incluya música relajante, puede no solo ayudar a que tu bebé duerma más fácilmente, sino que también pueda quedarse dormido durante más tiempo. De hecho, es una tradición cantar una canción de cuna para ayudar al bebé a que se duerma.
Pero, ¿cuál es la mejor música para dormir a tu bebé? ¿Influye el tipo de canción, la letra o la melodía?
La música que ayuda a dormir a tu bebé
Incluso antes de nacer, el bebé escucha los sonidos del mundo exterior. Alrededor de las 18 semanas, ya reacciona a los ruidos repentinos y se tranquiliza con el sonido de tu voz y el latido constante de tu corazón.
Es comprensible que cuando nace, estos elementos combinados (la voz, el ritmo cardiaco y el movimiento) sean tan reconfortantes y tranquilizadores para él.
Y si durante el embarazo le acostumbras a escuchar música, cuando nazca y la escuche, la reconocerá y la encontrará relajante.
Durante los primeros tres meses, las nanas y canciones de cuna relajan y calman a los bebés, dándoles una sensación de seguridad y calidez. Son melodías suaves y relajantes, con ritmos repetitivos, consistentes y simples, que les recuerdan los sonidos escuchados durante esos nueve meses en el útero.
Las nanas tradicionales como Estrellita dónde estás, Palmas palmitas o A dormir, son perfectas para cantarle a tu bebé y aunque, al principio, las mamás primerizas lo encuentran un poco extraño, no hay nada más relajante para un bebé que el sonido de la voz de su madre.
Para determinar si el tipo de música importa, los investigadores han examinado los efectos de tres tipos de música diferentes en los recién nacidos: una canción de cuna cantada por los padres del bebé, un instrumento que recrea los sonidos en el interior del útero y un tambor que simula los latidos del corazón.
El estudio descubrió que los 3 tipos de música disminuían la frecuencia cardíaca de los bebés, pero la canción de cuna cantada por los padres era la más efectiva.
Cualquier música con una melodía simple y lenta puede calmar al bebé, pero no toda la música los tranquiliza. La música fuerte o estridente, como el rap, el heavy metal y algunas canciones de country y rock, pueden sobreestimular al bebé, algo que no queremos a la hora de dormir.
Los investigadores también han identificado algunos sonidos específicos que los bebés encuentran especialmente reconfortantes. Y un bebé relajado, es un bebé con más probabilidades de quedarse dormido.
Además del ruido blanco y el sonido de los latidos del corazón, cualquier melodía que mantenga un tempo de 60 o menos pulsaciones por minuto es válida.
Pero, además, hay que tener en cuenta si la instrumentación es áspera y ruidosa o es dulce y suave; si hay letras, ¿son apropiadas? ¿son estimulantes o calmantes?; y si tú, como madre o padre, disfrutas de la música también, ya que lo más probable es que la escucharás durante mucho tiempo.
La canción más relajante del mundo
Con todas estas ideas en mente, los investigadores han logrado crear lo que es la canción más relajante del planeta.
La canción se llama Weightless, tiene una duración de aproximadamente ocho minutos y ha sido creada según parámetros específicos para la longitud, el tipo de sonidos, la clave musical y la estructura. Su objetivo es ayudar a los oyentes a quedarse dormidos rápidamente.
La música utiliza sonidos de ritmos bajos, como los de la naturaleza, o los latidos del corazón, que ayudan a reducir la ansiedad, el ritmo cardiaco e incluso el dolor leve.
Funciona mucho mejor que leerle cuentos o historias o dejarlos simplemente en la cuna descansando.
Sin embargo, es importante dejar la música puesta durante toda la noche. De esta forma, cuando tu bebé se despierte entre los ciclos de sueño, seguirá escuchando ese sonido familiar, reconocerá instantáneamente dónde está, se sentirá seguro y se volverá a dormir.