Tu bebé necesita dormir y tú también. Y seguro que duermes más tranquila si sabes cuáles son los riesgos a los que se expone tu bebé al dormir y cuál es la mejor manera de mantenerlo seguro mientras duerme.
Ese es el objetivo que nos hemos propuesto con este artículo, que conozcas todo lo que necesitas saber para que tu bebé duerma siempre seguro.
¿Qué encontrarás aquí?
¿Cuál es el lugar más seguro para que el bebé duerma?
El mejor sitio para que el bebé duerma es una cuna, ya sea estándar, de colecho, convertible, de viaje, etc., siempre que cumpla con la normativa europea vigente. La cuna debe tener un colchón firme que encaje perfectamente, para que no haya espacios por los que el bebé se pueda colar o quedar atrapado.
Si hay más de un bebé (gemelos, trillizos, etc.), hay que colocar a cada bebé en su propia cuna, ya que compartir la cuna o cama es la causa más común de muerte en bebés menores de 3 meses.
Si el bebé se queda dormido en el portabebés, la hamaca, la silla del coche, o en el cochecito, colócalo sobre una superficie firme tan pronto como sea posible. Es muy importante evitar que se duerma sobre cualquier superficie blanda: cama de agua, sofá, sillón, colchón blando, etc., aunque esté acompañado.
¿Con quién debe dormir el bebé?
Es bueno mantener la cuna del bebé en la misma habitación donde tú duermes, por lo menos durante los primeros 6 meses o, idealmente, durante el primer año. Esto ayuda a disminuir el riesgo de muerte súbita en un 50%. Además, te será más fácil vigilar a tu bebé, consolarlo y alimentarlo.
Aun así, necesita su propio espacio seguro. Puedes colocar la cuna cerca de tu cama o utilizar una cuna colecho, pero lo que no debes hacer es compartir la cama con tu bebé, sobre todo si tiene menos de 4 meses. Cerca de la mitad de todas las muertes por asfixia entre los bebés ocurren en una cama para adultos.
¿Cuál es la posición más segura para que duerma el bebé?
Hasta que cumpla un año, el bebé debe dormir boca arriba sobre una superficie plana y firme (por ejemplo, un colchón). Incluso, los bebés con reflujo deben dormir boca arriba. En esta posición hay menos probabilidades de que sufran el síndrome de muerte súbita que estando boca abajo o de costado.
A algunos padres les preocupa que los bebés se asfixien con el vómito o reflujo estando boca arriba, pero la anatomía de las vías respiratorias del bebé y el reflejo de las náuseas, impedirán que eso suceda.
Una vez que tu bebé pueda darse la vuelta (alrededor de los 4-6 meses), sigue poniéndolo a dormir boca arriba, pero deja que encuentre su propia posición para dormir.
¿Con qué objetos puede dormir el bebé?
Lo único que debe tener en la cuna es una sábana ajustada al colchón. Ni mantas, ni almohadas, ni peluches, ni juguetes, ni protectores o ropa de cama suelta, ya que podrían asfixiar al bebé si se enrolla en ellos.
Los chupetes también pueden ayudar a reducir el síndrome de muerte súbita. Si estás amamantando, espera hasta que el bebé tenga 1 mes antes de usar el chupete, pero nunca cuelgues el chupete alrededor de su cuello, ni lo fijes a su ropa mientras duerme. Tampoco hay necesidad de volver a ponerlo en su boca después de que se duerma.
¿Con qué ropa debe dormir el bebé?
Al vestir al bebé para dormir, la mejor opción es un saco de dormir de una pieza que no tenga capucha. Opta por pijamas que no tengan cuerdas, cordones o lazos y que no le cubran la cabeza.
El sobrecalentamiento es un factor de riesgo para el síndrome de muerte súbita, así que, dependiendo de la temporada, el saco o pijama debe ser más fino o más gordito. Simplemente, pregúntate qué te pondrías tú y utilízalo como guía.
En interiores, la cabeza del bebé debe estar al descubierto, esto le va a permitir no sobrecalentarse. Y no te preocupes si sus manos y pies están frescos, es algo normal.
La lactancia durante la noche ¿Cómo proceder?
Una de las mejores formas de ayudar a prevenir el síndrome de muerte súbita es amamantando a tu bebé. Varios estudios muestran que los bebés que son amamantados, incluso por un tiempo corto, tienen menos probabilidades de sufrirlo.
Ten cuidado de no darle de mamar mientras estéis sentados en una silla o en un sofá si estás cansada, ya que existe el peligro de quedarse dormido.