Desde el momento en que te enteras de que estás embarazada, te obsesionas con lo que puedes o no puedes hacer en estos nueve meses que te quedan por delante, como, por ejemplo, si podrás hacer running, comer sushi o bañarte en un jacuzzi.
Una de las cuestiones que más dudas suscita es la conducción. Por eso, en este artículo queremos contarte todo lo que necesitas saber de la conducción y el embarazo.
¿Qué encontrarás aquí?
¿Se puede y/o debe conducir cuando estás embarazada?
En principio, estar embarazada no supone ningún riesgo a la hora de conducir, siempre que no haya ninguna razón médica que lo desaconseje, ni tampoco existe una prohibición explícita al respecto en la normativa. Mientras tengas un embarazo normal, puedes seguir conduciendo durante el embarazo, todo va a depender de ti y de cómo te sientas.
Sin embargo, en la recta final del embarazo (de la semana 30 en adelante), pueden aparecer señales que te indiquen que no es aconsejable conducir, tanto desde el punto de vista de la comodidad, como de la protección de tu salud y la de tu bebé.
¿Cuándo no es aconsejable conducir estando embarazada?
Cuando te sientas cansada: no sólo cansa la tensión que genera la dimensión de tu abdomen, sino que también tener una temperatura corporal elevada (el aumento del volumen sanguíneo del cuerpo durante el embarazo afecta la temperatura corporal) puede hacerte sentir somnolienta.
Si a esto le añadimos el hecho de que por las noches no descansas bien debido a que estás incómoda, puede que por el día te encuentres cansada y no sea buena idea conducir.
Si aun así tienes que hacerlo, asegúrate de hacer descansos regulares y conduce solo cuando te sientas alerta y bien descansada.
Cuando tienes calambres: si sufres de calambres durante el embarazo, ten en cuenta que los viajes largos o con mucho tráfico suponen mantener tu postura en la misma posición durante un largo periodo de tiempo.
Esto también puede producir que se te hinchen los pies y los tobillos o que tengas acidez estomacal. La buena noticia es que con un poco de movimiento, puedes aliviar la incomodidad.
Trata de evitar los viajes largos en coche, sobre todo si vas sola. Es mucho más seguro compartir la tarea de conducir con otra persona. En caso de que tengas que hacer un viaje largo, toma un descanso por lo menos cada 90 minutos para estirarte e ir al baño.
¿Qué normativa hay respecto a conducir embarazada?
El uso del cinturón de seguridad en todos los asientos del vehículo es obligatorio para las mujeres embarazadas desde 2006, cuando se introdujo la norma al respecto en el Reglamento General de Circulación.
Esto es debido a que los riesgos de no llevarlo son mayores que llevándolo puesto. Se ha demostrado que usar el cinturón de seguridad es tres veces más seguro que no usarlo durante el embarazo.
El problema de llevar el cinturón, es que la banda inferior queda justo sobre el abdomen y, en caso de accidente, puede provocar daños y lesiones al feto. Sin embargo, el riesgo de lesiones por no usar el cinturón de seguridad es aún mayor.
Por eso, se recomienda abrocharse el cinturón de seguridad con la banda inferior por debajo del abdomen, de manera que quede ajustado en las caderas; y con la banda diagonal sobre la clavícula y rodeando el vientre.
Mantén el cinturón de seguridad ajustado y asegúrate de que la banda diagonal atraviesa tu pecho. Nunca lo coloques detrás del brazo o de la espalda.
Asimismo, las embarazadas al volante deben procurar ampliar la distancia que las separa del mismo, colocándolo a unos 25 cm del abdomen, así se evitarán posibles daños y lesiones en caso de accidente. Esta distancia se debe de ir ajustando al transcurrir el embarazo. Además, asegúrate de que el volante está inclinado hacia el esternón y no hacia el abdomen.
La combinación de cinturón de seguridad y airbag ofrece a la embarazada el más alto nivel de protección, siempre y cuando el cinturón esté bien colocado. Por eso, es importante que no desconectes los airbags.
¿Qué artículos existen para facilitarnos la conducción estando embarazadas?
Para evitar la incomodidad de tener que reajustar el cinturón de seguridad cada vez que se mueva, existen cinturones para embarazadas que fijan las bandas en una posición mucho más segura para el feto.
También es útil utilizar bandas o cintas de embarazo, especialmente cuando te encuentres en avanzado estado de gestación. Estas bandas ofrecen un apoyo extra para que te sientas más cómoda y tengas menos dolores.