Que un bebé requiere de cambios de pañal frecuentes, lo sabemos todos, pero no somos totalmente conscientes de esto hasta que nuestro bebé sufre de pañalitis.
En ocasiones, los cambios de pañal se prorrogan porque estamos fuera y distraídos, durante algún viaje largo que nos saca de la rutina o cuando lo dejamos al cuidado de alguien o en la guardería.
La temida pañalitis o dermatitis del pañal es una afección frecuente en bebés hasta los dos años. Es una inflamación que se presenta en la zona de la piel que suele estar cubierta por el pañal.
El calor, la humedad y no cambiar los pañales con frecuencia suelen ser la causa más común de la pañalitis. En ocasiones, durante la noche debemos decidir entre cambiar el pañal y despertar al bebé o saltar el cambio de pañal y dejarle dormir.
¿Qué encontrarás aquí?
Causas de la Pañalitis
Además de las ya mencionadas, otras causas de la pañalitis son:
- Irritación: el contacto entre la piel húmeda del bebé, la cubierta del pañal y las heces puede resultar extremadamente agresivo para su piel y ocasionar, en poco tiempo, una irritación en la zona del pañal, que será muy dolorosa y molesta.
- Alergias: algunos bebés pueden ser sensibles a ciertas marcas de pañales, jabón, toallitas húmedas o a cualquiera de los productos que utilizas para su cuidado o para lavar su ropa. El contacto con éstas sustancias puede originar dermatitis del pañal.
- Infección: al dejar mucho tiempo al bebé con el pañal húmedo y sucio, se altera el pH de la piel, lo que sumado al ambiente húmedo y oscuro, facilita la proliferación de hongos y bacterias y la consiguiente inflamación de la piel.
- La introducción de alimentos nuevos puede causar diarreas y el aumento de la frecuencia en las deposiciones, podría originar una pañalitis o agravar una ya presente
- Candidiasis: es un hongo capaz de producir una pañalitis severa. Suele afectar a bebés con el sistema inmunológico bajo debido a la toma de antibióticos o cuando la madre los toma durante la lactancia.
Síntomas
Los bebés con pañalitis suelen llorar y mostrarse incómodos o irritables sin causa aparente. Los síntomas que pueden presentar incluyen:
- Piel enrojecida y caliente al tacto
- En algunos casos, pueden aparecer grietas y apariencia de escamas
- La pañalitis más severa puede hacer sangrar la piel del bebé, que puede tener ampollas y lesiones supurantes.
Tratamiento
El mejor tratamiento para la pañalitis es la prevención, manteniendo siempre limpia y seca el área del pañal.
Cambios frecuentes de pañal y una cuidadosa higiene suelen ser suficientes. Un bebé recién nacido puede requerir unos ocho pañales por día, éste número va disminuyendo poco a poco, hasta los dos años cuando se inicia el proceso de dejarlos.
Pero si tu bebé ya tiene pañalitis y la higiene no mejora el proceso, debes acudir al pediatra quien te recomendará el tratamiento más efectivo para que sane la piel de tu bebé y aliviar sus síntomas.
Mi bebé tiene pañalitis: ¿qué debo hacer?
- Cambiar con mayor frecuencia el pañal.
- Mantener muy limpia y seca la piel del bebé. Haz énfasis en los pliegues.
- En cada cambio de pañal, lava la piel con agua tibia y un jabón muy suave.
- Seca su piel sin frotar, con pequeños toques. Utiliza un paño de algodón, no uses toalla porque puede resultar abrasiva. Los pañales de tela son ideales para secar la piel del bebé después del lavado porque son muy absorbentes y suaves.
- Deja secar la piel al aire antes de colocar el siguiente pañal, la idea es que no quede ningún rastro de humedad. Si es posible, deja al bebé sin pañal cuando puedas para acelerar el proceso de curación.
- Si el pediatra te ha recomendado alguna crema, ponla cuidadosamente, con tus manos limpias, sobre el área afectada sin frotar y asegúrate de que la piel esté bien seca.
¿Y qué no debo hacer?
- Utilizar toallitas húmedas. A pesar de que son muy suaves, la piel de tu bebé está muy sensible al roce, por lo que podrías causarle más dolor y empeorar la irritación. Para limpiar su piel es mejor que lo laves.
- Ajustar excesivamente el pañal. La piel irritada necesitará mayor ventilación.
- Utilizar pañales normales. Es mejor elegir pañales sin fragancia o para pieles delicadas, al menos mientras tu bebé mejora.
- Utilizar remedios caseros. Tu bebé es muy pequeño y su sistema inmunológico está aún en desarrollo. Por ejemplo, manzanilla o camomila, a la que se le atribuyen propiedades cicatrizantes, aunque es muy buena para tu piel, puede ser hepato tóxica para los bebés y afectar su hígado
- Utilizar talco.
- Su piel está muy sensible y lastimarías a tu bebé.
- Utilizar cremas que te recomienden otras mamás. Lo mejor es que sea el pediatra quien te indique la que debes usar.
En internet y consultando a otras madres podrás encontrar recomendaciones de remedios caseros para aliviar la pañalitis. Nuestro consejo es los evites. Lo más seguro es seguir las recomendaciones del pediatra.
Ante la inflamación de la piel, estos remedios caseros podrían agravar la condición ya existente y hacer mayor el problema.
Mantener la piel del bebé limpia y seca, basta para aliviar la pañalitis leve. Debería mejorar en un par de días. En caso de afecciones severas, lo mejor es consultar